Ya no estas

Yo sabia desde que lo conocí que el era libre como el viento, no quería encariñarme con él, porque me gustaba que fuera libre y corriendo por todos lados, además era callejero, y podía irse en cualquier momento. Pero fue inevitable, me demostró ser un fiel amigo y muy cariñoso, asi que es ineludible no sentirme mal porque ya no está.
Le di tiempo a que decidiera si se quedaba o no, volvía a comer seguido y sin compromiso de que se quedara, lo dejaba ir nuevamente. Hasta que un día se quedó y durmió toda la noche afuera en la puerta de la casa, así durante una semana, feliz en su locura e imparable en su afán de correr, con una energía poco antes vista, de pelo negro azulado que brillaba aun sin estar limpio del todo, tenía un ladrido particular, muy grave, que te asustaba, no tardó mucho en ser aceptado por toda la familia, no hace mucho se fue, (por los cuetes quizás) y se perdió.
Se llama Tronco, pero responde al nombre de “Negro”. Cuando decidió quedarse a la segunda semana lo bautice con un collar, poco le duró, señal que no le gusta que lo aten, lo dejaba ser libre por las tardes, (sin collar) y lo cómico es que le tenía miedo a la gata, cuando esta se enojaba lo sacaba a correr, pero el solo quería jugar y no paraba de molestarla.
No se si será, que se fue, porque yo estoy lejos del pueblo y de vez en ves lo veía, pero siempre que estaba disfrutábamos las tardes de sol juntos. Cuando me veía pegaba unos saltos terribles que llegaba a pasarme la lengua por la cara, le encantaba estar suelto, y siempre esperaba que alguien lo liberara. Hoy me falta alguien, que venga a molestar y pedirme una caricia, ya no esta para gritarle que se porte bien.
Lo extraño, pero la vida quiso que tomara otro rumbo, otros caminos, yo acá y el allá, a veces deseo poder encontrarlo en algún perro negro que callejea, muchos se parecen, pocos son como él, libre como el viento, tiene una pequeña mancha blanca en su pecho, es de hocico un poco cuadrado, ojos completamente negros, todavía es cachorro, muy amigable, nunca se torno violento ni aun con otros perros, espero que sino lo encuentro, que alguien lo sepa cuidar bien.
Hoy mi vida quiere que vuelva, solía irse por unos días y volvía, pero esta vez no se si va a volver, pasaron unos meses, mucho tiempo ya, pero si alguien lo ve por Areco y se acuerda de mi, que me avise, estaré muy agradecido, gracias igual por leerlo! Nehuén.