Ojo donde asoman las narices

El sábado estaba limpiando la cocina de mi casa, con las ventanas abiertas, y sentí un aroma que hacía mucho no sentía, un aroma que me transportó a, por lo menos, diez años atrás: cera de depilación, en su estado mas hirviente, doloroso y escalofriante. Relojeé las ventanas próximas a las mias, pero no había nadie. Ni en una, ni en la otra.

Mi nariz estaba enloqueciendo porque necesitaba saber de dónde venía el olor, asi que me acerqué un poco mas a la ventana, asomé un poco la cabeza, y ahí estaban: mi pareja de vecinos gays, depilándose las espaldas y charlando de lo cara que está la verdura.

Les hubiera preguntado si se copaban en hacerme el cavado, pero me dio vergüencita.

sacado de:
www.bit.ly/asoman

Comentarios

Entradas populares de este blog

El mito se termino: la verdad sobre Jorge Hane

Si ya sé, todos tenemos problemas existenciales y qué!

El tiempo pasa, nos vamos poniendo tecnos..

La cocina calienta el sexo

De pasiones y colores, besos chillones

¿Por qué las burbujas son redondas y no cuadradas?

El reflejo de una mujer

La chica del colectivo

El mejor verano de mi vida